La Misa comenzará a las nueve y media de la mañana. Pero una hora antes, el Papa recorrerá la plaza de San Pedro antes de entrar en la Basílica. Luego, dentro de la Basílica, visitará la tumba de Pedro con varios patriarcas.
P. FEDERICO LOMBARDI-Portavoz del Vaticano
“Los patriarcas, arzobispos mayores, todos los representantes de las Iglesias orientales católicas que participarán, acudirán junto al Papa a la tumba de san Pedro para hacer un homenaje, una oración”.
Ellos comenzarán una procesión con el anillo del pescador y el palio, que simbolizan su misión como pastor de la Iglesia.
Una vez en la plaza, el cardenal protodiácono Jean Louis Tauran, le dará el palio. El cardenal Godfried Danneels, como protopresbítero, pronunciará una oración. Y el cardenal decano Angelo Sodano, le entregará el nuevo anillo de pescador, de plata dorada.
P. FEDERICO LOMBARDI-Portavoz del Vaticano
“Esta vez el anillo que recibirá el Papa tiene representado a San Pedro con las llaves”.
Seis cardenales, dos de cada orden, harán el homenaje de obediencia al Papa, concluyendo la parte inicial de la ceremonia.
Después comenzará la Misa solemne de la fiesta de San José. Siguiendo con su estilo, el papa Francisco ha acortado la celebración para hacerla más sencilla. Un cambio notable, como guiño a los católicos orientales, será el Evangelio.
P. FEDERICO LOMBARDI-Portavoz del Vaticano
“Para simplificar, durante la Misa el Evangelio será cantado sólo en griego, porque el resto de la Misa será en latín”.
Después de la Misa, el Papa se dirigirá al interior de la basílica para saludar a las delegaciones de 132 países que han confirmado su participación.
Representantes de diferentes religiones estarán presentes, entre ellos el Patriarca ecuménico Bartolomé I, delegados de 32 confesiones cristianas y 16 colectivos judíos. También acuden representantes de musulmanes, budistas, del sijismo y del jainismo. El Vaticano prevé que participen al menos 200 mil personas.
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