Inicialmente el Hogar, a cargo de las Hermanas de la Congregación Obreras Catequistas de Jesús Sacramentado, se ocupaba solo de la atención de niñas, desde pequeñas hasta la adolescencia, con el sistema de internado.
Con la nueva Ley de Protección de los Derechos del Niño y del Adolescente, el lugar se transformó en un hogar abrigo, donde se ayuda a las familias en el cuidado de sus hijos varones y mujeres de corta edad, los que permanecen en el lugar durante el día.
Consultada la Hermana Liliana Moyano, Directora del querido establecimiento local, agradeció a todas las personas “que colaboran permanentemente con nuestro Hogar, que son muchísimas, y lo hacen de distintas maneras, sobre todo poniendo al servicio la propia persona, donando su tiempo, su alegría, para estar con los niños, abrir las puertas de su casa y con la ayuda material de distintas maneras. Gracias a todos ellos estamos celebrando estos 53 años”.
Sobre el presente del Hogar La Providencia, dijo que “se atienden a niños y niñas, diez en total en este tiempo, que vienen durante el día, teniendo en cuenta el trabajo de los padres. Brindamos un espacio para que no se queden solos, ya que la mamá trabaja y aquí se los atiende y se los contiene en sus necesidades”.
A Religiosa informó además que “visitamos también a un grupo de familias que tratamos de ayudarlas de distinta manera. Hoy por hoy hay situaciones muy variadas, muy difíciles, muy dolorosas; tenemos la esperanza que estas necesidades se vayan atendiendo de fondo, que no sea como un parche que se pone para salir del momento, sino que sean soluciones definitivas, junto a los adultos que son responsables de los niños, para que puedan crecer de la mano de sus padres, pero teniendo los valores básicos, la dignidad y la posibilidad de jugar, crecer, ser felices”.
Agregó la Hermana Liliana que se asientan en 7 años de implementación de la nueva ley, “cuyo espíritu es muy positivo, pero que en la práctica implica muchas veces la nueva vulneración de derechos de los niños y adolescentes que la legislación busca proteger”.
Por lo tanto comentó que reflexionaba junto al Papa Francisco con una de sus frases: “jamás provoques lágrimas en un rostro que te ha regalado sus mejores sonrisas; como sociedad debemos pensar cuántas lágrimas provocamos en el rostro de los niños, que siempre, y con toda sinceridad, nos regalan sus mejores sonrisas”.
La Directora del Hogar La Providencia luego agregó que “nosotros muchas veces no sabemos ver esas lágrimas, no queremos o pasamos de largo o le ponemos motivos que realmente no son y que podríamos evitar en muchas ocasiones. Saber por qué un niño llora, poderlo solucionar y muchas veces no querer hacerlo o dilatar la solución es una injusticia. Hay que pensar que esas lágrimas de niño van marcando la vida de un argentino, que luego regirá los destinos de la patria, de una forma o de otra. Tenemos en la mano nuestro presente y nuestro futuro; luego nos preguntamos ¿por qué estamos así como país?, cuando lo sabemos, no es tan misterioso: si con sinceridad nos ponemos a ver la respuesta no está tan escondida”.
La celebración por el aniversario del Hogar La Providencia se inició por la tarde con una misa en acción de gracias en la Capilla de la entidad de la calle Lamadrid y luego se sirvió un ágape a la canasta con colaboradores y amigos de la casa, mientras que el sábado la celebración será para los niños y sus familias....
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