Alrededor de cien jóvenes y dirigentes de 30 diócesis de toda la Argentina se encontraron para celebrar la XXV Asamblea Nacional de Pastoral de Juventud, en la Casa de espiritualidad “La Asunción”, en Bahía Blanca.
El objetivo de la asamblea fue seguir construyendo juntos la civilización del amor y esta es la máxima instancia de participación y decisión de la Pastoral de Juventud.
Esta asamblea ha sido central en el proceso de la Pastoral Nacional ya que se enmarca en el cierre del trienio 2009-2012 que fue coordinado por Mercedes Baxzos y Darío Rizzuto. Para el trienio 2012-2015 la coordinación nacional estará a cargo de Nicolás Marín, de la diócesis de Bahía Blanca, y Lorena Chagas, de la arquidiócesis de Mercedes-Luján.
Por otro lado se designó como nuevo obispo delegado a monseñor Vicente Bokalic en lugar de monseñor Daniel Fernández, Administrador Apostólico de Jujuy. Monseñor Raúl Martín continuará en el nuevo trienio como obispo delegado de la Conferencia Episcopal Argentina.
La primera jornada de trabajo consistió en un balance del trienio 2009-2012. Por otro lado se llevó a cabo la articulación con el Espacio Joven, con la Pastoral de Drogadependencia y Religiones por la Paz.
En la segunda jornada, se votó a favor la relectura del Plan Nacional propuesta de la Comisión Nacional de Pastoral de Juventud, iniciándose así un nuevo ciclo en la Pastoral de Juventud Nacional.
También se presentó el IV Gesto Común de la región Cono Sur, integrada por la Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay y Chile. En la semana del 5 al 12 de agosto la propuesta es que los jóvenes de todo el país bajo el lema “Si pinta joven, pinta vida” lleven a cabo una pintada de murales en lugares públicos, en el marco de la defensa de la vida y como respuesta a las diversas formas de violencia de la que son víctimas los jóvenes.
Monseñor Bokalic destacó que “si queremos desarmar la violencia, necesitamos meternos adentro. Mirar a Jesús para vivir la cercanía, sin actitudes de enjuiciamiento, simplemente acercarnos y hacerles sentir que nos interesa su vida. Esto está en la base de muchas acciones. Crear vínculos, solamente el amor sana”.
Los jóvenes recibieron la visita de monseñor Pedro Laxague, obispo auxiliar de Bahía Blanca. El prelado reflexionó en torno a la fe: “Tenemos que tener la mirada de Jesús, al que está en el dolor, no importa si tiene fe o no. Hay mucha miseria para ir acercándonos. El amor de Dios nos cambia. No tengan miedo, sean creativos en el amor, si nos aburrimos es porque no le ponemos el amor necesario y el que se encuentra con el Señor no lo deja más”.
Él último día de la Asamblea estuvo abocado a pensar los criterios pedagógicos, pastorales y místicos para releer el Plan Nacional y el trabajo por regiones.
Para cerrar el encuentro y antes de la misa de clausura, se aprobó el mensaje final en el que los jóvenes de la Argentina afirman: “Queremos seguir siendo una Pastoral de Juventud a imagen de Jesús Buen Pastor y reconocerlo como modelo para nuestra acción pastoral. Es por esto que nos encomendamos a Él, y ponemos bajo el manto de nuestra madre María de Luján la vida de todos los jóvenes de la Argentina, para que sea Ella el camino hacia su Hijo”. +
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